Entrevista personal – Consejos generales

Los solicitantes tendrán una entrevista personal con uno o más examinadores. Normalmente, los solicitantes tienden a estar nerviosos antes de hacer esta entrevista. Simplemente piensa que los otros candidatos estarán nerviosos también, y algunos de ellos tendrán incertidumbre. Por eso, ten en mente que tu solicitud ya ha despertado el interés en el proceso escrito de selección, por lo que solo ese pensamiento, debería darte el coraje más que suficiente para continuar adelante. Ya estás a solo un paso de conseguirlo.

Una buena preparación es el mejor remedio contra el nerviosismo.

Una buena preparación para la entrevista es esencial, especialmente cuando se solicita la beca de alguna fundación. Deberás tener claro en todo momento que estás pidiendo un favor: una oportunidad. Mientras te prepares, deberías planificar qué preguntas te podrían preguntar y qué clase de respuestas deberías dar. En la mayoría de los casos, lo más probable es que te pregunten sobre tu vida o sobre tu carrera profesional, por lo que deberías memorizarla y ser capaz de reproducirla con naturalidad en el caso de que el examinador te lo pregunte. Deberías también prestar atención a la estructura de tu vida o carrera profesional, y pensar en las razones que te han llevado a tener ese CV en concreto.

Dejarás una buena impresión si llegas allí con un conocimiento previo sobre la fundación. Prepara todas las razones que puedas para convencer de que eres el candidato perfecto y de porqué mereces recibir esa beca.

En cuanto al vestuario, es mejor ir más elegante de la cuenta que pecar de lo contrario. En caso de que seas mujer, un consejo útil sería vestir una blusa y, en el caso de los hombres, es mejor ir combinado con un traje, una camisa y una corbata a juego. En el caso de que veas que los otros participantes van vestido de forma más “casual”, siempre puedes quitarte la chaqueta y la corbata. También es altamente recomendable llevar un bolígrafo y una libreta contigo.

La primera impresión cuenta.

La impresión más importante en una entrevista se lleva a cabo durante los primeros minutos. Por lo tanto, el saludo deberá ser realizado estrechando la mano fuertemente y con seguridad, de modo que les des la impresión de que eres una persona segura de sí misma. Pero ten cuidado de no parecer demasiado brusco. Durante el saludo deberías mantener un contacto visual directo con el examinador y llamarlo por su nombre durante el proceso. Por el contrario, mirar al suelo implica que eres una persona insegura. Tener en todo momento una agradable sonrisa crea una impresión agradable durante toda la entrevista, por lo que ten en cuenta esto también. En el caso de que estés esperando al examinador o a los examinadores en una habitación, levántate cuando él o ellos entren en la habitación para saludarles como es debido. De esta manera estarás mostrando respeto. Muchos de los examinadores empiezan la entrevista con una pequeña conversación sin importancia para crear una atmósfera más cordial. Una pregunta muy frecuente es sobre tus viajes. Si tus entrevistadores te preguntan si has tenido un buen viaje, deberías decir que sí, aunque no sea verdad. Ya que lo que te conviene es crear una buena atmósfera durante los cinco minutos que vaya a durar la entrevista.

Motivado para obtener resultados, tanto para ti como para los demás.

En un principio, las fundaciones lo que quieren es apoyar a los estudiantes que estén motivados para alcanzar el éxito tanto para ellos mismos como para los demás, ya que ellos quieren invertir en ti. Por lo tanto, muestra que tienes una determinación fuerte y que tienes unas metas muy claras en tu cabeza. Del mismo modo, mantén tus argumentos siempre bien estructurados y ordenados.

Las fundaciones quieren que sus becarios/as sean socialmente comprometidos, por lo que deberías estar interesado en realizar aportaciones a la comunidad y a la vida de otros. Por eso, te daremos el mejor consejo de todos: escucha con atención lo que dice tu entrevistador. ¡Buena suerte!.